En el mundo de las finanzas, el mercado de futuros hace referencia al mercado en el que se comercializan contratos estandarizados de compraventa de una cierta mercancía a un precio y cantidad determinados, para ser cumplidos en el futuro.
Contratos de futuros.
En este tipo de contratos, la fecha de entrega de los bienes o mercancías está fijada en un punto determinado en el tiempo; de ahí la expresión futuros, es decir, son contratos que se cumplen en un plazo determinado.
Por ejemplo, el productor de petróleo firma un contrato en enero de 2022 para entregar un cargamento de petróleo en junio de 2022, fijándose el precio de antemano, lo que elimina la incertidumbre de la fluctuación natural de los precios.
Muchas veces, las mercancías o los bienes intercambiados o vendidos en un mercado de futuros son commodities (en el sentido de materias primas a granel o mercancías producto de la agricultura). Sin embargo, los mercados de futuros también comprenden otro tipo de mercancías, tales como divisas, valores financieros (títulos de crédito) u otros instrumentos financieros.
Características de los contratos de futuros.
Una característica de los contratos de futuros es su alta estandarización; esto asegura su liquidez. Al estar predefinidos los detalles respecto al contrato de futuros, tales como la moneda en la que está denominado, el tipo de instrumento o mercancía del que se trata y la cantidad de la que se habla (entre otros), se crea un mercado en donde, sin importar quién sea el poseedor del contrato, se asegura el cabal cumplimiento de todos los parámetros del contrato. En teoría, los parámetros que se pueden incluir en un contrato son infinitos. Es por eso que hay un número limitado de contratos estandarizados; es la manera de asegurar la liquidez.
El mercado de futuros es estabilizador en razón de que puede ayudar a proteger a proveedores y productores de cambios de precios en una mercancía.
Ejemplo de contrato de futuros.
Un ejemplo concreto puede ser una carnicería y un agricultor. La carnicería vende sus cortes a 3 dólares (derivando de ello una ganancia) y el agricultor vende su carne a la carnicería a 2 dólares (con una ganancia también). Si, por alguna razón, como una enfermedad del ganado, el agricultor tuviera que subir el precio de la carne, la carnicería vería desaparecer sus ganancias. Al realizar un contrato con un inversionista, el agricultor y la carnicería transfieren la posible volatilidad de los precios al inversionista, que se compromete a vender y entregar la carne a cierto precio, sin importar las circunstancias. Si sube el precio de la mercancía, el inversionista con el contrato de futuros absorbe la pérdida. Si baja el precio de la mercancía, el inversionista se queda con la ganancia al entregar la mercancía a un cierto precio cuando pudo comprarla a un precio menor.
Ventajas del mercado de futuros.
Como ya señalamos, la principal ventaja de los futuros es la estabilidad que proporcionan, en razón de que se fija un precio de venta o compra en el presente para pagarse en el futuro, cuando se cumpla el contrato.
El precio pactado en los futuros se mantiene sin importar si, para la fecha en que se debe cumplir el contrato, el precio ha subido o bajado, lo que es un beneficio tanto para el comprador como para el vendedor, que pueden hacer un presupuesto con valores previamente determinados.
Por supuesto, existe un riesgo tanto para el comprador como para el vendedor, porque el precio real al momento de cumplir el contrato puede haber cambiado, pero en todo caso existe una estabilidad en razón de que se elimina la incertidumbre respecto a cómo será el mercado en un futuro.
En resumen, el mercado de futuros funciona para reducir el riesgo y hacer más "visibles" los precios reales de las mercancías.
Forma de citar este artículo (APA):
Gerencie.com. (2021, noviembre 15). Mercados de futuros [Entrada de blog]. Recuperado de https://www.gerencie.com/que-son-los-mercados-de-futuros.html