Estabilidad ocupacional reforzada

La estabilidad ocupacional reforzada es una evolución de la estabilidad laboral reforzada conocida tradicionalmente, que es una garantía constitucional que protege a los trabajadores que tengan una afectación en su salud física o mental que les impida o dificulte sustancialmente el desempeño de sus actividades laborales en las condiciones regulares, con independencia de si tienen una calificación de pérdida de capacidad laboral moderada, severa o profunda.

Sujetos cubiertos por la estabilidad ocupacional reforzada.

La estabilidad ocupacional reforzada aplica tanto a los contratos de trabajo como a los contratos de prestación de servicios.

Y como ya se indicó, la estabilidad ocupacional reforzada cobija a todo trabajador por el simple hecho de tener una enfermedad o dolencia que limite la capacidad laboral del trabajador, queda cobijado por la estabilidad ocupacional reforzada.

En consecuencia, para que un trabajador quede protegido por la estabilidad ocupacional reforzada, no hace falta que exista una calificación de pérdida de capacidad laboral, ni hace falta que esta tenga un porcentaje determinado, sino que es suficiente con que, producto de la afección, tenga una limitación sustancial para ejercer sus labores, lo que cubre un espectro mucho más amplio que la estabilidad laboral reforzada tradicionalmente conocida.

Indemnización en la estabilidad ocupacional reforzada.

Cuando se viola la estabilidad ocupacional reforzada, hay lugar al pago de la indemnización de 180 días de salario contemplada en el artículo 26 de la Ley 361 de 1997.

Estabilidad laboral reforzada

Despido de trabajador por incapacidad superior a 180 días