Cuando la empresa degrada de cargo a un trabajador sin disminuirle el salario, se configura un desmejoramiento de las condiciones de laborales del trabajador, por cuanto el salario no es el único elemento que se valora en estos casos, sino que se deben valor otros aspectos como el honor, la dignidad y el respeto del trabajador.
Las empresas suelen cambiar el cargo o las funciones de un trabajador a una de menor rango o categoría sin disminuir el salario bajo la creencia que de ese modo no le puede acusar de desmejorar las condiciones laborales del trabajador, lo que es incorrecto.
La sala laboral de la Corte suprema de justicia en sentencia SL3179-2018 fue enfática en afirmar que a pesar de que el cambio de puesto del trabajador no implique una disminución salarial ni un cambio en el nivel jerárquico, el traslado de la accionante representa un deterioro de sus condiciones laborales debido al cambio de funciones con respeto a aquellas para la que había sido contratado.
En dicha sentencia la sala expone que la terminación del contrato de trabajo invocada por la demandante, basada en una degradación funcional y profesional que empeora sus condiciones laborales, está debidamente comprobada, y que esa conducta afecta la estima y dignidad de la trabajadora como empleada de dirección, lo cual constituye justa causa que configura el despido indirecto.
En consecuencia, el trabajador puede presentar su renuncia debidamente justificada en la degradación del cargo y las funciones con fundamente en la causal 7 del literal b) del artículo 62 del código sustantivo del trabajo, lo que lo habilita para reclamar el despido indirecto y el pago de la respectiva indemnización por despido injusto.
Trataremos de darle respuesta.