Precio del dólar afecta patrimonio e ingresos de las personas

El precio del dólar afecta tanto el patrimonio como los ingresos de las personas. Veamos por qué.

El precio del dólar y el patrimonio de las personas.

Para evidenciar que el precio del dólar aumenta o disminuye nuestro patrimonio según baje o suba la cotización del dólar, debemos convertir nuestro patrimonio en dólares para hacer la comparación.

Supongamos que tenemos una casa avaluada en $400.000.000, y tenemos un dólar que cuesta $4.000. Haciendo la conversión, nuestra casa vale 100.000 dólares, pero si el dólar sube a $5.000, nuestra casa valdrá 80.000 dólares.

Nuestro patrimonio disminuirá en el mismo porcentaje en que sube el precio del dólar. Si el precio sube un 10%, nuestro patrimonio expresado en dólares disminuye en un 10%. Nos hacemos un 10% más pobres.

Ingresos en pesos y el precio del dólar.

Al igual que con el patrimonio, nuestros ingresos suben o bajan cuando los expresamos en dólares en la medida en que cambia la cotización del dólar.

Por ejemplo, para el 2022 el salario mínimo es de $1.000.000, que con un dólar en $4.000 equivale a un salario de 250 dólares, pero con un dólar a $5.000 el salario mínimo es de apenas 200 dólares, lo que significa que el salario mínimo ha perdido el 20% de su valor.

Por qué expresar el patrimonio y los ingresos en dólares.

Nuestro patrimonio e ingresos en pesos siguen invariables, así que en teoría no somos más pobres cuando la cotización del dólar sube, pero en la realidad es que sí somos más pobres porque el precio del dólar incide directamente en la capacidad de compra que tienen los ingresos.

La gran mayoría de bienes y servicios que consumimos son importados, y los que no lo son, se producen con materias primas e insumos importados, y las importaciones se pagan en dólares, dólares que se compran en pesos, y entre más pesos valga un dólar, más pesos se deben pagar por esas importaciones.

Supongamos un producto que cuesta 100 dólares importarlo. Con un dólar a $4.000, ese producto nos vale $400.000, pero con un dólar a $5.000, ese mismo producto nos vale $500.000.

Eso significa que con nuestro salario podremos comprar menos cosas cuando el precio del dólar sube, es decir, nuestro salario ha perdido poder adquisitivo, y cuando eso sucede significa que somos más pobres porque ahora podemos comprar menos cosas que antes.

Si no se hace la conversión a dólares, tendremos la ilusión de que todo está bien cuando la realidad es otra.

Precio del dólar y la inflación.

Entre más caro es el dólar, más sube la inflación debido precisamente a que se requieren más pesos para comprar los dólares con que se pagan las importaciones, lo que las hace más costosas.

Las importaciones se hacen más caras en moneda local en la medida en que la cotización del dólar sube, y los importadores tienen que trasladar ese incremento al consumidor final, lo que genera inflación.

Además, un dólar caro hace que se hagan menos importaciones, lo que genera escasez de algunos bienes, y la escasez genera inflación por cuenta de la ley de la oferta y la demanda.

Dólar más caro, más pobreza.

Un dólar caro desvaloriza el salario y el patrimonio, haciendo a los ciudadanos más pobres. No existe otra conclusión y no se requiere mayor explicación para comprenderlo.

¿A quién beneficia el dólar caro?

El dólar caro beneficia a las personas y empresas que cobran en dólares, es decir, a los exportadores de bienes y servicios en razón de que recibirán más pesos por los dólares que reciben.

Sin embargo, debe tenerse en cuenta que las exportaciones, por lo general, tienen un alto componente de insumos y materias primas que se importaron a un alto costo en moneda local debido al alto precio del dólar, por lo que se debe descontar ese efecto para determinar el beneficio real para el exportador al tener un dólar caro.

Además, el dólar caro hace que la economía se relantice, lo que termina afectando a los exportadores que no obtienen el mismo rendimiento debido a los problemas económicos que causa la devaluación de la moneda, por lo que una subida del dólar raramente trae un beneficio real a los exportadores.

Es por eso que países que han sufrido períodos de hiperinflación como Alemania en los años 1930, Argentina y Venezuela más recientemente, han visto arruinadas sus economías porque la hipotética ganancia que obtienen los exportadores al tener altas cotizaciones del dólar no es suficiente para compensar los estragos que causa la devaluación, lo que es una prueba de que la devaluación causa un empobrecimiento general de empresas y familias.

Cómo protegerse de un dólar caro.

Cuando el dólar se encarece significa que el peso ha perdido valor, así que la principal medida que toman las personas es deshacerse del peso a cambio de dólares, lo que a su vez hace que el dólar suba más de precio y el peso valga menos, haciendo que las personas quieran deshacerse más rápido del peso a cambio de dólares, lo que crea un espiral o círculo vicioso que agrava la crisis, y de allí lo importante que es para un país evitar que las personas pierdan la confianza en su moneda.

Quien quiere proteger su patrimonio de la subida del dólar, por lo general, trata de sacar su patrimonio y riqueza del país, y ello implica invertir en dólares como mecanismo para sacar esa riqueza del país.

Por ejemplo, si usted tiene un apartamento valorado en $1.000.000, y quiere salir del país, vende ese apartamento y necesariamente debe cambiar a dólares los pesos que recibe para transferirlos al exterior, para allí adquirir otras inversiones, ya sea otro apartamento, o comprar acciones o simplemente tener una cuenta de ahorros en el país al que se muda.

Las personas que tienen grandes capitales los sacan del país y en el exterior tienen múltiples opciones para invertir su dinero.

Las personas que no tienen grandes capitales y que no pueden salir del país, tienen más difícil proteger su patrimonio de la devaluación del peso, porque quedan atrapadas en una economía que se derrumba día a día, y haga lo que haga su patrimonio valdrá menos cada día.

Sin embargo, existen activos o inversiones que conservan mejor el valor, o que lo pierden a menor velocidad, como bienes raíces y acciones en empresas que se identifican como estables.

Lo que no se debe hacer es tener el dinero en efectivo o en una cuenta bancaria, debido a que este pierde rápidamente su valor por cuenta de la elevada inflación.

Es importante precisar que las decisiones de inversión son complejas y riesgosas, y requieren asesoría experta según cada caso particular.

¿Por qué sube el precio del dólar?

No existe una explicación simple ni certera de por qué el precio del dólar sube, pero en general es el resultado de la oferta y demanda del dólar en el mercado.

Cuando hay pocos dólares en el mercado y hay muchas personas comprando dólares, el precio del dólar sube, así que el asunto se trata de identificar dos variables:

1. ¿Por qué hay pocos dólares en el mercado?
2. ¿Por qué hay mucha gente comprando dólares?

A continuación, abordaremos muy tangencialmente algunas de las muchas causas que afectan el equilibrio del mercado del dólar que lo llevan a elevar su cotización.

Escasez de dólares.

Hay pocos dólares porque las personas que los tienen no quieren traerlos al país, y en general son los inversionistas.

Por ejemplo, cuando un inversionista internacional ve que la situación económica, política, jurídica, de seguridad, infraestructura, etc., no es ideal para los criterios de inversión que valora, decide no invertir en el país, y son dólares que no llegan al mercado y un mercado sin dólares significa un dólar caro.

La otra fuente importante de dólares son las exportaciones, y cuando la economía va mal, las exportaciones disminuyen, y entre menos exportaciones menos dólares hay en el mercado.

Otra de las razones por las que los dólares no llegan al país es porque hay otros mercados que ofrecen mejores rendimientos para los inversionistas, y eso se hace muy evidente cuando la FED sube la tasa de interés, pues significa que se hace más atractivo invertir en los bonos del tesoro de USA que invertir en Colombia, donde el país ha sido evaluado negativamente.

El capital no tiene fronteras y se irá al país que le asegure más rendimientos o, al menos, mayor seguridad de que no se perderán las inversiones.

Es cuestión de competitividad, puesto que los mercados compiten por el capital disponible, y aquel mercado que ofrezca mayores rendimientos, seguridad y estabilidad se llevará la mayor parte, creando escasez en los mercados menos atractivos como el nuestro.

Alta demanda de dólares.

La otra cara de la moneda es la demanda del dólar, y esa demanda también depende de cómo los inversionistas evalúan el estado general de la economía de un país.

Cuando las personas o empresas que han invertido en el país analizan que sus inversiones corren riesgos, se llevan sus inversiones del país, y eso crea una alta demanda de dólares que presiona la cotización del dólar.

De otra parte, cuando la economía del país es sombría, muchos exportadores optan por no traer los dólares que reciben por sus exportaciones, y en algunos casos, desinvierten, lo que acentúa la escasez de dólares.

Cuando se pierde confianza en un país, los inversionistas huyen con su dinero en busca de un mercado con mejores proyecciones.

Entre más se pierde confianza, menos dólares llegan al mercado, y más personas quieren comprar dólares para proteger su riqueza, lo que agrava la escasez del dólar que se traduce en una subida de cotización.

Por qué se pierde confianza en una economía.

El precio del dólar lo fija el mercado, es decir, por una parte, la oferta de dólares y por otra la demanda de dólares, y tanto la oferta como la demanda del dólar se ven afectadas por la confianza tanto del que oferta los dólares como del que los demanda.

Cuando hay desconfianza, los ofertantes de dólares disminuyen la oferta de dólares, y los compradores demandan más dólares que ya son escasos, incrementando el precio del dólar.

¿Pero qué es lo que genera desconfianza en el mercado?

Existen múltiples razones por las que un inversionista pierde confianza en un país, y entre las más importantes tenemos:

• Política económica.
• Política fiscal.
• Política tributaria.
• Estabilidad política.
• Seguridad jurídica.
• Competitividad general del país.

Todas ellas llevan a que el inversionista determine que sus inversiones son riesgosas y decida retirarlas o no hacerlas, creando escasez de dólares.

Como ya lo señalamos, una empresa o persona no invertirá su dinero en un país en el que los indicadores señalan claramente que se corre el riesgo de perder la inversión o que el rendimiento de sus inversiones será menor del que puede obtener en otro mercado.

Igualmente, si ya invirtió el dinero, lo retirará en cuanto empiece a ver indicadores que suponen un riesgo para sus inversiones, lo que genera huida de grandes capitales.