Patrimonio de personas naturales en la declaración de renta

El patrimonio es uno de los conceptos que las personas naturales deben incluir en su denuncio rentístico en caso de estar obligados a declarar renta, lo que incluye declarar tanto activos como pasivos u obligaciones.

Patrimonio de las personas naturales.

El patrimonio de una persona natural está conformado por todos los bienes y derechos que estén a su nombre, como inmuebles, vehículos, acciones, etc. Es lo que se conoce como patrimonio bruto.

Los pasivos también forman parte del patrimonio que las personas deben declarar en el impuesto a la renta, como hipotecas, deudas bancarias, deudas con proveedores, etc.

Restando los pasivos al patrimonio bruto se determina el patrimonio líquido, que también debe aparecer en la declaración de renta.

Activos de una persona natural.

Cuando las personas naturales tienen que declarar renta deben declarar todos los activos que estén a su nombre, es decir, todos aquellos bienes y propiedades de los que la persona posee el dominio jurídico, por lo que se debe hacer la sumatoria respectiva.

Es el caso de los inmuebles (casas, apartamentos, locales, terrenos o fincas), semovientes, vehículos, inversiones, etc.

Se incluyen también cuentas bancarias, CDT, cuentas de aportes voluntarios a pensión, acciones o inversiones en sociedades.

Los activos se declararán según su valor patrimonial de acuerdo a las normas generales que contempla el estatuto tributario (artículos 261 al 286 del estatuto tributario), pero en el caso de las personas naturales, por su informalidad y debido a que muchas no llevan contabilidad, resulta difícil que el valor patrimonial de los activos se corresponda a lo que dispone el estatuto. Sin embargo, en general se declaran por su costo fiscal, que a su vez corresponde al costo de adquisición, y en el caso de los inmuebles, puede ser el avalúo catastral.

El patrimonio se utiliza para lo siguiente:

1. Para determinar la renta presuntiva hasta 2020.
2. Para determinar una posible renta por comparación patrimonial.
3. Para determinar el impuesto a la riqueza o patrimonio cuando hay lugar a ello.
4. Para determinar la ganancia ocasional en caso de vender bienes que hacen parte del patrimonio.

Como se puede observar, el estado tiene especial interés en que los contribuyentes determinen correctamente su patrimonio.

Se puede señalar que entre mayor sea el patrimonio, más elevados serán los elementos enumerados anteriormente (renta presuntiva, renta por comparación patrimonial, impuesto a la riqueza y ganancia ocasional), lo que lleva a las personas naturales a tratar de reducir el valor fiscal de su patrimonio, pero ello no siempre es recomendable.

Pasivos de una persona natural.

Los pasivos son un elemento importante, ya que permiten disminuir el patrimonio líquido, pues este es igual a los activos menos los pasivos. Las personas, en su obsesión de mostrar un patrimonio fiscal menor, declaran pasivos que no cumplen con los requisitos legales.

La persona natural tiene activos y pasivos, y los pasivos disminuyen el patrimonio, que está compuesto por los activos de la persona natural.

Los pasivos deben estar comprobados, y tratándose de las personas naturales, en caso que no lleven contabilidad, solo pueden probarlos con documentos de fecha cierta. Así que no se deben declarar deudas con la suegra, con la mamá o con los hermanos, a no ser que tengan fecha cierta, lo cual puede suponer contratos, títulos valores, autenticaciones, etc.

Entre los pasivos que se pueden declarar están los créditos bancarios, cuyo soporte es el extracto respectivo; obligaciones con particulares siempre que estén soportadas con un documento, contrato o título valor con fecha cierta; y las deudas con entidades del estado como la Dian, UGPP, etc.

Los pasivos que se pueden declarar son los que estén vigentes al 31 de diciembre del año, al igual que los activos, tal como lo expresa el artículo 282 del estatuto tributario:

«Concepto. El patrimonio líquido gravable se determina restando del patrimonio bruto poseído por el contribuyente en el último día del año o período gravable el monto de las deudas a cargo del mismo, vigentes en esa fecha.» Negrilla fuera de texto.

La norma se refiere al último día del año o periodo gravable, que no es otro que el 31 de diciembre, al menos en el caso de las personas naturales que no se liquidan en el transcurso del año como suele suceder con las personas jurídicas.

Es importante recordar que las deudas deben estar a nombre de la persona que las declara, pues de no ser así la Dian rechazará ese pasivo en caso de un proceso de fiscalización.

Cómo deben declarar las personas naturales sus vehículos.

Los vehículos o automóviles hacen parte del patrimonio de las personas naturales, por lo tanto se deben declarar.

Su valor patrimonial, en principio, es el costo de adquisición, y en los años siguientes, dependiendo de si la persona natural lleva o no contabilidad, puede hacer los ajustes fiscales e, incluso, aplicar la depreciación, lo que permite ajustar el valor patrimonial por el que se declara el activo.

Respecto al reajuste fiscal de los vehículos, no tiene mucho sentido para las personas naturales porque los vehículos se deprecian muy rápidamente, y el desfase entre el valor comercial y el costo fiscal ajustado del vehículo puede ser muy elevado.

En cuanto a la depreciación, pueden ser objeto de ella los vehículos que hayan contribuido en la generación de renta del contribuyente, más no el vehículo de uso personal o familiar.

Y respecto a la depreciación de los vehículos, la norma tributaria solo la autoriza a los contribuyentes obligados a llevar contabilidad, pero el Consejo de Estado ha estimado que, si el activo contribuye a generar renta, así la persona no lleve contabilidad tiene derecho a la deducción por depreciación, tema abordado en el siguiente artículo.

Recordemos que la depreciación es útil en el sentido de poder disminuir el costo fiscal del activo y de paso el valor patrimonial por el que se debe declarar, de manera que, si es procedente depreciar un vehículo, su valor patrimonial disminuirá en el valor depreciado.

Por último, señalar que las personas naturales suelen declarar su vehículo según el valor sobre el que se liquida el impuesto a los vehículos, lo que es incorrecto, toda vez que no existe una norma que considere tal posibilidad.

Cómo se deben declarar los inmuebles de la persona natural.

Los inmuebles de las personas naturales se declaran según las reglas que señala el artículo 277 del estatuto tributario, que establece que en el caso de las personas naturales que no están obligadas a llevar contabilidad, los inmuebles se deben declarar por el mayor valor entre los siguientes conceptos:

1. Costo de adquisición.
2. Costo fiscal.
3. Avalúo catastral.

Se determina cada uno de estos valores y se declara por el que resulte más elevado.

Las personas naturales pueden ajustar el costo fiscal de sus inmuebles conforme al artículo 73 del estatuto tributario, tema desarrollado en el siguiente artículo.

Las personas naturales que estén obligadas a llevar contabilidad deben declarar sus bienes inmuebles según el costo fiscal que se determine con base en las reglas fijas del estatuto tributario a partir del artículo 67, costo que se construye a partir del costo de adquisición al que se le suman otros conceptos, como el reajuste fiscal, y algunas adiciones y mejoras.

Patrimonio líquido negativo en las personas naturales.

Se puede dar el caso en que el patrimonio líquido de la persona natural resulte negativo, lo que ocurre cuando sus pasivos son superiores a sus activos.

En tal caso, en el formulario de la declaración de renta se coloca cero, pues no se puede colocar un valor negativo.

Declaración de renta por patrimonio.

La declaración de renta por patrimonio surge cuando el único tope que se supera es precisamente el del patrimonio, tope que está en 4.500 UVT, que para 2022, que se declara en 2023, es de $171.018.00.

A continuación, damos respuesta a las preguntas frecuentes realizadas por nuestros lectores.