El despido del trabajador debe ser legal y justo; sin embargo, en ocasiones no tenemos claridad respecto a estas figuras, lo que lleva al empleador a cometer errores que luego pueden implicarle un proceso laboral desfavorable a sus intereses.
Modalidades de despido.
Para aclarar este tema, es necesario precisar que no todo despido injusto es ilegal, ni todo despido ilegal es injusto.
Por otra parte, el despido injusto no es ilegal y, por el contrario, es legal porque la ley lo autoriza expresamente; por ello, instituyó la indemnización por despido injusto.
El despido justo puede ser ilegal, lo que parece extraño precisamente porque no se tiene claridad sobre estas figuras, por lo que a continuación abordaremos cada una de ellas.
Despido justo y legal.
Un despido puede ser considerado tanto justo como legal. Esto ocurre cuando el empleador termina el contrato de trabajo debido a que el trabajador ha incurrido en una de las faltas previamente establecidas por la ley como causales justas de despido, y el trabajador no cuenta con ningún tipo de protección legal que impida su retiro, ni se ha contemplado un proceso especial para la desvinculación.
En este caso, al haberse incurrido en la justa causa, es suficiente con su acreditación para poner fin al contrato de trabajo, lo que no impide al trabajador demandar al empleador, quien deberá demostrar la justa causa.
Despido injusto e ilegal
En algunos casos, el despido no solo es injusto sino también ilegal. Esto sucede, por ejemplo, cuando un empleador despide a una mujer embarazada sin que esta haya cometido ninguna de las causas contempladas por la ley como razones válidas para terminar el contrato. Es ilegal porque la ley prohíbe expresamente este tipo de despido sin un procedimiento especial (autorización del ministerio de trabajo), y es injusto por la razón mencionada.
Despido justo e ilegal.
También existe la posibilidad de un despido que sea justo pero ilegal. Por ejemplo, cuando un trabajador con limitaciones físicas es despedido después de ser atrapado robando dinero o herramientas de la empresa, pero el empleador no ha obtenido previamente la autorización del inspector de trabajo; el despido es justo porque la acción del trabajador está tipificada por la ley como una causa justa de despido, pero es ilegal debido a la omisión de un requisito legal.
Despido legal e injusto.
En algunos casos, el despido puede ser legal pero injusto. Un ejemplo de esto sería cuando un trabajador es despedido debido a la liquidación y cierre de la empresa. Es legal porque está contemplado en la ley como una forma válida de terminar el contrato de trabajo, pero es injusto ya que la ley no lo considera una causa justa de terminación del contrato.
Consecuencias del despido injusto y del ilegal.
Es importante destacar que esta clasificación es relevante para determinar si se debe pagar una indemnización. El artículo 64 del Código Sustantivo del Trabajo establece que la indemnización se aplica únicamente en caso de despido sin justa causa. En situaciones de despido ilegal, lo que procede es la reinstalación o reintegro del trabajador, con la posibilidad de recibir una indemnización en ciertos casos.
En resumen, el despido puede ser legal o ilegal, justo o injusto, y estas categorías son fundamentales para comprender las consecuencias legales y las posibles indemnizaciones asociadas a cada situación.
Es importante destacar que, aunque la ley exige que se informen los motivos del despido, el incumplimiento de este deber no convierte automáticamente el despido en ilegal, sino que lo clasifica como injusto.
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